Por Jonathan Cable
LONDRES, 3 mar (Reuters) – La economía de la zona euro se encuentra casi con toda seguridad inmersa en una doble recesión, ya que las restricciones impuestas por la pandemia siguen afectando a su importante sector servicios, según una encuesta publicada el miércoles, pero las esperanzas de que se acelere el ritmo vacunación hicieron que el optimismo en la región alcanzara un máximo en tres años.
Los casos de coronavirus notificados han seguido siendo elevados en los 19 países que utilizan el euro, ante lo que los Estados han obligado a cerrar locales de hostelería y ocio y animado a los ciudadanos a quedarse en casa.
El índice compuesto de gestores de compras (PMI, por sus siglas en inglés) de IHS Markit, considerado un buen indicador de la salud económica de la zona euro, subió a 48,8 puntos desde los 47,8 de enero, por encima de la lectura preliminar de 48,1, pero todavía por debajo de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción.
Este aumento se debió en gran parte al crecimiento casi récord del sector manufacturero, ya que la mayoría de las fábricas han permanecido abiertas. [EUR/PMIM]
“Puesto que la actividad total ha registrado una contracción por cuarto mes consecutivo, la economía de la zona euro está en camino de señalar una recesión de doble caída”, dijo Chris Williamson, economista jefe de empresas de IHS Markit.
“Si bien muchas empresas de hostelería en el sector servicios continúan estando fuertemente afectadas por las restricciones relacionadas con la COVID-19, al sector manufacturero les va mejor y está suavizando el impacto económico general a raíz de las medidas de confinamiento”, añadió.
La economía de la zona del euro se contrajo en los dos primeros trimestres de 2020 y una encuesta de Reuters realizada el mes pasado entre economistas preveía que volvería a hacerlo en el cuarto trimestre y en el actual, afirmando que los riesgos para sus ya débiles perspectivas estaban sesgados a la baja. [ECILT/UE]
Los analistas encuestados señalaron como graves amenazas los retrasos en el despliegue de las vacunas en la Unión Europea, la preocupación por las nuevas variantes del coronavirus que respaldan los confinamientos actuales, el estancamiento de la actividad económica y el aumento del desempleo.
El PMI del sector servicios, el más afectado por las restricciones, subió a 45,7 puntos el mes pasado, por encima de los 45,4 de enero y de la estimación preliminar de 44,7, pero todavía muy por debajo del punto de equilibrio.
La demanda cayó por séptimo mes consecutivo, a pesar de que las empresas recortaron sus precios, pero los negocios del sector servicios aumentaron su plantilla -aunque de forma marginal- por primera vez desde el pasado mes de febrero, justo antes de que Europa sufriera la primera ola de la pandemia.
El índice de empleo en el sector servicios subió a 50,2 puntos desde la anterior lectura de 49,8.
La campaña de vacunación de la UE se ha visto empañada por los recortes en los suministros prometidos, los retrasos en el despliegue y cierta resistencia social, pero hay expectativas de que estos problemas se solucionen, y el índice compuesto de producción futura, que mide el optimismo, repuntó a 67,0 puntos desde una lectura de 64,2.
“Las esperanzas de que las campañas de vacunación tengan éxito y de que se produzca una marcada desescalada de las restricciones relacionadas con la prevención de la COVID-19 ayudaron a impulsar la confianza empresarial hasta su nivel más alto en tres años”, señaló IHS Markit.
(Información de Jonathan Cable; editado por Catherine Evans; traducido por Darío Fernández en la redacción de Gdansk)